Reducir a la mitad es el proceso de reducir la recompensa por extraer un bloque en una cadena de bloques de criptomonedas. Por ejemplo, en el caso de Bitcoin, la recompensa por minar un bloque disminuye aproximadamente a la mitad cada cuatro años. Este proceso se llama reducción a la mitad (del inglés «halving»). Es inherente a aquellas redes en las que las criptomonedas operan según el algoritmo de consenso de prueba de trabajo.
Pero ¿por qué es necesario? La reducción a la mitad juega un papel en el control de la inflación de las criptomonedas al reducir la emisión de nuevas monedas.
Los algoritmos de las criptomonedas como el Bitcoin no permiten imprimir una cantidad infinita de dinero. La oferta de Bitcoin está limitada a 21.000.000 de monedas y, debido al mecanismo de reducción a la mitad en la red Bitcoin, la oferta de monedas está creciendo progresivamente y es notablemente inferior a la tasa de crecimiento de la demanda de ellas.
La importancia de este proceso se puede ver comparando Bitcoin con el oro. Las reservas de oro del mundo son limitadas y con cada gramo extraído, resulta cada vez más difícil obtener el oro restante. Fue como resultado de esta oferta limitada que el oro conservó su valor como medio internacional de intercambio y depósito de valor durante más de seis mil años.
El impacto de reducir a la mitad las criptomonedas podría ser significativo. Suele estimular el crecimiento del precio de la criptomoneda. Antes y después del halving, la demanda de moneda digital supera la oferta y el tipo comienza a subir.
El halving no es sólo un acontecimiento que cambia la economía de las criptomonedas, sino también un claro ejemplo de cómo las tecnologías blockchain están redefiniendo poco a poco el ámbito financiero, introduciendo cambios en la forma de almacenar y transferir el valor.